A diario, millones de personas utilizan baños públicos en establecimientos como centros comerciales, bares, empresas, universidades, lugares de ocio, etc. Por este motivo, es fundamental que estos cumplan con la normativa en seguridad e higiene y que cuenten con la accesibilidad que demandan las personas con movilidad reducida. Esto hace que sea necesario contar con un modelo de cabina de inodoro que cumpla con todo ello.

Normalmente, estos están separados por sexos y es recomendable contar con un espacio único con ambos sexos que incluyan un acceso independiente para hombres y mujeres. De esta forma, pueden ser utilizados con persona que padecen una discapacidad y que requieran asistencia en el baño.

En Saunavital te contamos en este artículo cómo elegir una cabina de inodoro para implantar en un baño público, así como señalar sus medidas idóneas, ventajas y características.

Breve historia de los baños públicos

El origen de los baños públicos lo encontramos con los romanos, quienes adjudicaron este espacio como un lugar de reunión social. No fue hasta siglos posteriores cuando se consideró la higiene como una medida de prevención de enfermedades y la clase alta comenzó a implantar baños privados en sus hogares.

Las clases populares continuaron utilizando los baños públicos, que poco a poco se fue delimitando para establecer un espacio determinado para el hombre y otro para la mujer como ya se habían en los baños privados. Además, se adaptó la idea y costumbre de considerar el aseo como un espacio individual, dando lugar a las cabinas de baños públicos.

Hoy en día, el acceso al baño está regulado por la OMS para garantizar las medidas mínimas de los baños (públicos y privados) para garantizar el mantenimiento de los mismos y una buena higiene.

¿Qué es un baño público?

Actualmente, un baño público es un espacio que dispone de lavabos e inodoro (como mínimo) y que puede ser utilizado por los usuarios en lugares públicos como son gimnasios, hoteles, centros comerciales, en la restauración, colegios, etc.

En función del espacio que disponga, se pueden incluir más o menos urinarios o lavabos. Un dato importante a tener en cuenta es que, cuanto mayor sea el número de cabinas, mejor será el servicio para los usuarios al no tener que realizar colas innecesarias y mejorando la limpieza de los mismos.

Cuánto debe medir un baño público

Antes de siquiera pensar en instalar un modelo de cabina de inodoro, hay que tener en cuenta de los estándares mínimos para las medidas en un baño público, así como la separación entre las cabinas.

Medidas mínimas de un aseo

Por norma, un baño público debe contener las dimensiones mínimas de 82 x 70 x 50 cm (alto, ancho y fondo). Además, si hablamos de un lavabo público, este debe estar encajado en una encimera y tener una separación entre los lavamanos de unos 80 cm y 20 cm del eje a la pared.

Es importante contar con un material que pueda soportar el uso continuado, el agua y la humedad.

Dimensiones mínimas de una ducha

Las cabinas para duchas se pueden modular de muchas formas. Sin embargo, las medidas mínimas que debe contener un plato de ducha en el baño (independientemente de que sea para vestuario o privado) es de 60 x 60 cm y un alto de mampara de ducha de 2 metros.

Espacio mínimo para un inodoro o retrete

Las medidas para un retrete o inodoro en baños públicos (también se ajusta a los privados) es de 39.4 x 50 x 70 cm (alto, ancho y profundidad). En caso de urinarios, estos deben medir 75 x 45 x 35 cm (alto, ancho y profundidad).

Como en el caso de los lavabos, han de tener una distancia de 20 cm entre ellos y respecto a la pared.

Medidas mínimas de los vestuarios

La ratio para calcular las cabinas de inodoro por vestuario ha de equivaler a 1 wc por cada 5 mujeres y 1 wc por cada 25 hombres. Valorando la cantidad de gente que puede albergar y visitar el vestuario, hay que hacer un cálculo y aplicar las medidas para el inodoro, los lavabos y las duchas.

Ventajas de una cabina de inodoro

Las cabinas de inodoro proporcionan privacidad para aquellos que entren en ella. Sin embargo, hay que valorar que, para sentir la satisfacción a la hora de acudir al baño, es obligatorio que este disponga de una correcta higiene para no crear sensación de desagrado en el usuario. Por ello, están fabricados a base de materiales que permiten una fácil limpieza. También cuenta con otras ventajas como son:

• Tienen una instalación sencilla y no necesitan apenas obra. Únicamente hay que avisar a los expertos para la instalación. También se suelen incorporar en áreas de duchas y vestuarios.
• Son útiles en lugares como hospitales, empresas, centros educativos, centros comerciales y lugares con gran trasiego de personas, ya que se pueden encajar en espacios limitados.
• Podemos encontrar modelos con amplia variedad de diseños y colores para escoger el que más le guste al cliente a nivel visual y según las necesidades del negocio.
• Su limpieza es muy sencilla, puesto que, gracias a su material, ayudan a que las bacterias, hongos y suciedad se eliminen de manera fácil al limpiarlas con herramientas y productos de limpieza adecuados.
• Son muy resistentes, por lo que el material aguanta muy bien agresiones externas como golpes, rayones o el propio uso. También soportan las constantes manchas gracias a que es impermeable.
• Gracias a su instalación se asegura la privacidad de los usuarios. Varias personas pueden acceder al baño y cada una tendrá su espacio sin sentirse incómoda por la presencia del resto.

Aspectos a tener en cuenta antes de elegir una cabina de inodoro

Antes de elegir una cabina de inodoro, es conveniente conocer ciertos factores que son determinantes para crear un espacio idóneo para los usuarios:

• Espacio disponible. Planificar el espacio es algo fundamental. Antes de escoger un material determinado, es necesario saber los metros cuadrados que tendrá el baño con sus complementos y haciendo hincapié en las cabinas de inodoro como en los lavabos.
• Materiales. El material es un factor clave para escoger las cabinas de inodoro. La resistencia va a determinar la eficiencia de los mismos, como es el caso del uso de paneles fenólicos. Es un elemento diseñado para zonas tendentes a ser húmedas y repeler corrosión, bacterias, hongos, con una limpieza sencilla y resistente a altas temperaturas. Comúnmente, los inodoros son fabricados en porcelana, aunque también hay modelos de acero inoxidable.
• Distribución. La distribución de los elementos del baño ha de estar bien estructurada para aprovechar al máximo el espacio y proporcionar un servicio confortable.
• Personas con movilidad reducida. Los baños públicos actuales han de ofrecer la mejor opción para personas con movilidad reducida. Estas cabinas cuentan con lavabo y un inodoro (altura 46 a 48 cm). Además, el inodoro ha de contar con barras de apoyo situadas a los lados de wc y un espacio libre junto al wc de 80 cm.

¿Qué son las cabinas sanitarias fenólicas?

Una cabina de inodoro se considera una cabina sanitaria, aunque dentro de este grupo también entrarían cabinas destinadas a vestuarios, cambiadores o duchas.

Suelen ser espacios cerrados de uso individual y privado, fabricados con un compuesto fenólico y creados para que las personas los puedan utilizar para realizar actividades relacionadas con la higiene personal (asearse, cambiarse de ropa o ducharse). Con el material fenólico se cumplen los requerimientos de diseño y calidad en espacios sanitarios.

Habitualmente podemos encontrar estas cabinas sanitarias en instalaciones deportivas, centros comerciales, hoteles y otros establecimientos que necesitan un espacio para que los usuarios se puedan cambiar de ropa o asearse. Así mismo, también podemos encontrarlas en áreas con servicios de baño y ducha como son campamentos, campings, áreas de descanso y estaciones (tren, autobús, aeropuertos), etc.

Características de las cabinas fenólicas

Generalmente, una cabina sanitaria está compuesta por un material fenólico compacto con poco grosor y herrajes de acero inoxidable para su sujeción. Otros detalles de estas cabinas son:

• Está compuesto por resinas fenólicas totalmente resistentes a la humedad, a altas temperaturas y de fácil limpieza.
• Puede contener patas regulables.
• Los paneles fenólicos son ideales para conseguir un mayor nivel de intimidad.
• Las puertas suelen añadir un pomo y pueden incluir un perchero de acero inoxidable.
• Las bisagras que incorpora son de acero inoxidable.

En Saunavital te hemos contado con detalle la importancia de una cabina de inodoro dentro de los baños públicos y el porqué están construidas, en su mayoría, en material fenólico para asegurar la limpieza y la higiene de estos espacios públicos. Con nosotros podrás encontrar la mejor variedad de cabinas sanitarias con capacidad de personalización (texturas, colores, diseños) para que tus usuarios puedan acceder al baño con total seguridad e intimidad. Contáctanos para saber más.